Gabriela Estévez es diputada nacional por el Frente de Todos, habló en “Trascendental” acerca de los incendios en su provincia, en Córdoba. Explicó el proyecto que lleva adelante con su bloque político. Se trata de no permitir por ley que durante sesenta años existan proyectos urbanísticos en los bosques nativos o en los humedales donde existieron incendios. De esto modo, dice la diputada Estévez, se posibilita que las tierras arrasadas por los incendios puedan regenerarse.
“La provincia de Córdoba perdió bosques nativos a causa de los incendios, se han perdido en total 148 mil hectáreas. A veces por negligencia, otras por malas prácticas agropecuarias, y otras muchas veces por especulación para proyectos urbanisticos” explicó Estévez. “La prohibición de la recategorización de los usos del suelo por sesenta años es justamente para eso, para que no se quemen bosques nativos, que eso sea una acción que desmotive cualquier tipo de incendios con fines especulativos”, precisó la diputada nacional por Córdoba.
“El único gesto real es la conservación de las áreas protegidas. El bloque de Cambiemos no apoyó este proyecto. Queremos impedir que en esas tierras tengan tiempo suficiente para que esos bosques -aún sufriendo los incendios-, se regeneren”, detalló Estévez. Y también vinculó este proyecto de ley a nuestra región: “Esto puede aplicarse también al Delta del Paraná, este proyecto de esperar los sesenta años para que la tierra se recupere, aplica también para los humedales del Río Paraná” destacó.
“Este año la cantidad de hectáreas que se quemaron en distintas provincias es impresionante, en definitiva lo que se busca con este proyecto de ley es evitar la especulación financiera, y que la tierra arrasada por los incendios pueda convertirse de nuevo en un pulmón para el nuestro ecosistema”, sostuvo Estévez.
Los diputados del Frente de Todos que suscriben a este proyecto, -que no apoyó el bloque opositor de Cambiemos-, son los justicialistas Leonardo Grosso, Daniela Vilar, Gabriela Estévez, Eduardo Fernández, Pablo Carro, Vanesa Massetani, Alejandra Obeid, Marcos Cleri, y Elda Pertile.
“El objetivo de este proyecto no sólo es proteger aquellos ecosistemas que puedan ser víctimas de incendios y garantizar las condiciones para la restauración de las superficies, sino también desalentar los incendios intencionales y la especulación financiera e inmobiliaria”, resaltó Estévez, al tiempo que agregó “la iniciativa determina que por el término de 60 años no se podrán cambiar el uso de los bosques nativos o implantados, áreas naturales protegidas y humedales, a fin de garantizar las condiciones para la restauración de las superficies incendiadas, y de 30 años en el caso de zonas agrícolas”.
En ese plazo no se podrán realizar en los bosques naturales o implantados la división, subdivisión, loteo, fraccionamiento o parcelamiento, total o parcial, o cualquier otro emprendimiento inmobiliario, distinto al arrendamiento y venta, de tierras particulares. Tampoco se podrá hacer cualquier actividad agrícola que sea distinta al uso y destino que la superficie tuviera al momento del incendio.
En el caso de incendios de zonas agrícolas, praderas, pastizales, matorrales y en áreas donde las estructuras edilicias se entremezclan con la vegetación fuera del ambiente estrictamente urbano o estructural, se permitirán modificar esos suelos por el termino de 30 años para lograr su restauración.
El proyecto fija que no se podrá cambiar el uso de esas zonas para emprendimientos inmobiliarios o cualquier actividad agrícola que sea distinta al uso y destino que la superficie tuviese como habitual al momento de los incendios.