“La renuncia de Alicia Castro es una expresión de coherencia ética, si no está de acuerdo con la política de Cancillería, no puede ser representante del Presidente de la Nación, como embajadora en Rusia”, aseguró Eduardo Sigal, el ex Subsecretario de Integración Económica y Mercosur durante la gestión de Néstor Kirchner. Alicia Castro objetó la declaración que avaló la Argentina en el Consejo de Derechos Humanos donde piden a Maduro llamar a elecciones en Venezuela.
La propuesta embajadora argentina en Rusia, Alicia Castro, salió a expresar su rechazo a la resolución votada por nuestro país en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
“El canciller Felipe Solá votó la Resolución del Grupo de Lima, condenando a Venezuela, con Bolsonaro, Duque, Piñera, Viscarra, en cuyos países se violan flagrantemente los Derechos Humanos. México votó con Venezuela. Un lamentable giro en nuestra política exterior”, enfatizó Alicia Castro, quien ocupó la embajada en Caracas y mantuvo un fuerte vínculo con el presidente Hugo Chávez.
El posicionamiento de la Argentina en la ONU -a través del Canciller Felipe Solá-, exigió al presidente Nicolás Maduro que atienda las denuncias por violaciones a los derechos humanos y convoque de manera urgente a elecciones independientes.
Por su parte, Eduardo Sigal, en diálogo con “Trascendental” expresó al periodista José Maggi que “lo mejor hubiese sido abstenerse en la ONU porque este tipo de declaraciones ponen en peligro una posible invasión en Venezuela que no compartimos”. Al tiempo que precisó “La renuncia de Alicia Castro es una expresión de coherencia ética, si no está de acuerdo con la política de Cancillería, no puede ser representante del Presidente de la Nación, como embajadora en Rusia”.
Sigal se referió a la declaración que aprobó la Argentina junto con otros 21 países en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU donde se denunciaron violaciones a los derechos humanos por parte de la administración de Nicolás Maduro y se insta a Venezuela a “tener elecciones, transparentes y libres, lo antes posible”.
Sigal, cercano al Instituto Patria y Ex Subsecretario de Integración Económica y Mercosur con rango de Embajador durante los gobiernos de Néstor y Cristina Fernández de Kirchner, remarcó que “No comparto el informe Bachelet acerca de Venezuela. Es sesgado; hay violación de derechos humanos en Bolivia, en Brasil. Tenemos que ver con los dos ojos la realidad, 22 países apoyaron el informe de Bachelet, otros 22 se abstuvieron y solamente existieron dos abstenciones”.
Qué hubiese ayudado a Venezuela? se preguntó Sigal, yo que la Argentina me hubiera abstenido. Entre Argentina y México hubieran llegado a un acuerdo, podrían haber sido un intermediario entre el gobierno de Maduro y el informe de Bachelet. El informe es sesgado, insisto, y eso achica la amplitud de su consideración” puntualizó Eduardo Sigal.
“Lo de Alicia Castro es una expresión de coherencia ética. Respeto profundamente a Alicia Castro. La experiencia en la Cancillería indica que hay que ser cuidadoso de las interpretaciones subjetivas. Hay que tener en cuanta el contexto, sobre todo cuando Alberto Fernández anunció su política de cooperación con México”, concluyó Sigal.
Por su parte, el periodista Coco López, columnista de política internacional en el noticiero “Trascendental” destacó su coincidencia con la opinión de Eduardo Sigal en este tema: “Condenar los derechos humanos en Venezuela es la herramienta política, al igual que ocurrió en Cuba, para justificar el bloqueo económico. Volver a las relaciones carnales con EE.UU significa para algunos países obtener créditos y ayuda del FMI”, aseveró.