El precio varía según la marca y la presentación, ya que se ofrecen en crema, en aerosol y en spray. Los más onerosos son los que se adaptan a los niños menores de dos años. No hay, por ahora, inconvenientes de stock.
Es general la sorpresa por la presencia de mosquitos en esta zona; no por que se hagan presentes – natural en esta época del año, y más aún, con el calor y la elevada humedad que campean por estos días – sino por la enorme cantidad de esos insectos, que malogran muchos momentos que uno quiera pasar al aire libre, y aún las noches, privando muchas veces del descanso necesario a quien no logre activar a tiempo un método de rechazo a los mismos.
Un rápido y efectivo relevamiento de precios y requerimientos de la gente fue realizado en las calles de Rosario por el puesto periodístico móvil de LT8, por medio del cual y a través del programa “Todos en La Ocho”, una solícita y avezada empleada de una farmacia informó, en primer término, acerca de los precios y los tipos de repelentes que pueden encontrarse en negocios: “los precios varían la presentación – crema, aerosol, spray – desde 90 pesos hasta 600 pesos. Los más caros son los empelados para los niños menores de dos años”.
“La gente lleva, preferentemente, los de larga duración. Además, se incrementó la venta de espirales. El costo no subió ahora, sino cuando apareció con fuerza el dengue, pero desde entonces, se mantuvo, y por suerte, no hay problemas de stock”, anunció la entrevistada.
El precio que sí sufríó una suba es el de los protectores solares, que se presentan en crema y aerosol: cuestan entre 10 y 20 por ciento más que en diciembre de 2019. Los más requeridos son los aptos para niños.
Finalmente, la mujer pidió, como medidas de prevención del dengue, “mantener limpio el patio, los bebederos de animalitos, las canaletas, etc. También, colocar boca abajo tachos y baldes y vaciar regularmente las piletas, si no tienen filtro”.