El responsable de Salud de la Municipalidad de Rosario admitió que el escenario general es preocupante y sostuvo que son necesarias nuevas determinaciones desde el Estado nacional.
Ayer se informaron casi 500 casos positivos de Covid en Rosario, mientras que el cómputo nacional arrojó el mayor número desde el 27 de octubre, con más de 13 mil casos.
Así las cosas, el secretario de Salud Pública de Rosario, Leonardo Caruana, admitió estar mirando con preocupación el escenario general.
“En países limítrofes como Chile, Bolivia y Uruguay se detecta una curva ascendente, mientras que en el Amba (Área Metropolitana de Buenos Aires) y en ciudad de Buenos Aires se registra un aumento de 190 y 120 por ciento”, analizó.
“En provincia de Santa Fe estamos en un ‘valle’, con un amesetamiento pero en número alto. La tendencia es distinta a la de meses anteriores (más en centro-norte que en centro-sur) y se empieza a notar en centros de salud un aumento de consultas con sintomatología”, agregó.
“El horizonte es complejo. Se combinan la aparición de la vacuna con la posibilidad del aumento de contagios. Esa famosa ola a veces es asumida como un fenómeno natural y espontáneo pero no es tal cosa, sino que se da por el aumento de la relajación de la población. Las normas nos hacen bien a todos, pero predomina el no cuidado y eso impacta en la población vulnerable”, sintetizó.
Así como la provincia dice que a fines de febrero habría un pico de contagios, Caruana se mostró partidario de tratar de analizar las decisiones a tomar. “Ante un escenario nacional de complejidad hay que analizar propuestas de restricciones e intervenciones sanitarias que puedan atenuar el impacto del aumento de consultas, más allá de picos, que se analizan posteriormente al crecimiento”, subrayó.
Ante las aglomeraciones que se observan en lugares turísticos –y qué medidas podrían adoptarse con las personas cuando vuelvan de sus vacaciones–, el funcionario dijo que “todas las medidas tendrán que ponerse sobre la mesa, con responsabilidad del Ejecutivo Nacional, igual a la que se tuvo al principio”. “Una de las posibilidades puede ser poner en cuarentena a quienes vuelvan, como también hacer el seguimiento de cada viajero. Son necesarias las determinaciones desde el Estado nacional”, destacó.
“Convivir con el virus nos lleva al relajamiento y a naturalizar muertes. Hay que hablarles a quienes no hicieron las cosas bien. Si hicimos cosas que no debíamos, habrá que hacer esas cosas distinto, para cuidar al resto de la población. No debemos resignarnos a que no podemos hacer más nada. Hay que encontrar un equilibrio. Cuidarnos nos hará bien a todos, todos seremos ganadores, porque también se beneficiarán la economía y el sistema social”, concluyó.