La concejala Ghilotti prometió monitorear que “ningún barrio quede aislado, se mejore la frecuencia, y se cumpla”.
Se vienen tiempos de cambios y rediseños en el transporte público de la ciudad y el tiempo dirá si son positivos. Por lo pronto, a partir del 1º de febrero, el boleto pasará a costar 45 pesos –una suba del 35 por ciento– y habrá cambios y fusiones de líneas buscando, según aseguran desde el municipio, optimizar el servicio.
La secretaria de Movilidad, Eva Jokanovich, destacó que la principal preocupación de los usuarios son las frecuencias, que ahora promedian los 18 minutos entre coche y coche y se buscará llevarla a 12 minutos. Otro dato significativo es que el pliego de transporte hablaba de más de 800 colectivos circulando en la ciudad y hoy hay solamente 460, casi la mitad.
En diálogo con LT8, la concejala Renata Ghilotti, advirtió que harán un seguimiento de la aplicación de lo que anunciaron en las últimas horas. “Vemos con mucha preocupación que estén eliminando líneas”, dijo.
“Hoy Rosario funciona con 64 líneas y en este contexto se eliminan algunas, la fusión, y la suspensión de las que actualmente están suspendidas, recordando que funcionamos con frecuencia de días sábado; no es el mejor panorama”, evaluó. “No tuvimos mucho mas tiempo para analizar la propuesta de la funcionaria, nos enteramos del anuncio que van a aumentar el boleto el 1 de febrero”, agregó.
Y si bien dijo que entienden la situación critica del transporte, relativizó la posibilidad de solucionarlo eliminando líneas y aumentando el boleto.
“La principal demanda del usuario es la frecuencia, la gente se queja porque el colectivo demora una hora en pasar; en eso debe trabajar el ente de la movilidad y ponerle el foco el intendente”, consideró Ghilotti. Para la concejala, esto “no será una solución al problema que plantean los usuarios”
“Espero que se encuentre una vuelta y se ponga al usuario como eje principal y escuchen sus reclamos; vengo advirtiendo que al usuario no se lo escucha”, reiteró. “Hay que entender que quienes usan el colectivo en Rosario, muchas veces es el único medio de transporte que tienen”.
Por último, prometió poner el foco “en que no quede ningún barrio aislado, se mejore la frecuencia y se cumpla; vamos a estar monitoreando”