Dos policías y dos ex empleados de seguridad del boliche Ming fueron imputados por homicidio simple con dolo eventual en grado de coautores en la causa que investiga la muerte de Carlos “Bocacha” Orellano, ocurrida en la madrugada del 24 de febrero de 2020 después de que lo echaran de ese local bailable.
A los dos policías, que son pareja y esa noche hacían tareas adicionales, se les mantuvo además la imputación que tenían desde diciembre por incumplimiento de deberes de funcionario público y falsedad ideológica.
En la audiencia realizada ayer, el fiscal Patricio Saldutti desarrolló una larga lista de evidencias que condujeron a esta nueva etapa de la investigación que continuará con los cuatro imputados detenidos con prisión preventiva por el plazo de ley.
En diálogo con LT8, el fiscal Saldutti dijo que “las cuatro personas que fueron imputadas ejercieron violencia física contra Orellano, lo acorralaron contra la baranda del rio a la altura del muelle 3, y aprovechándose de la superioridad física y numérica, determinaron que caiga al agua, donde se produce la muerte”. Esa es la teoría del caso de la fiscalía.
La defensa planteó un hecho mas del tinte accidental; y la querella tiene otra teoría del caso; “pero en principio y a ese nivel ha compartido y ha hecho propia en la audiencia, la imputación y calificación de la fiscalía”, dijo Saldutti.
El letrado explicó además que tenían testimonios desde febrero del año pasado “que nos podían plantear distintas teorías del caso; fuimos viendo cual de estas hipótesis del hecho se iban fortaleciendo con las pruebas que se iban agregando y cuales se iban debilitando”. Y en definitiva, “con las últimas pruebas científicas que recibimos decantó en la decisión de ordenar la detenciones y la imputación porque ahora tenemos pruebas científicas que le dan sustento objetivo a una de las versiones del hecho que contó un grupo de testigos”