Las restricciones anunciadas por el gobierno provincial impactan de lleno en el negocio, y pone en jaque la rentabilidad.
Santa Fe resolvió declarar a toda la provincia como territorio de alto riesgo epidemiológico, lo que implicará que las medidas restrictivas impuestas en el decreto nacional se aplicarán en forma homogénea en toda la provincia.
Además, en el marco de la implementación del decreto de necesidad y urgencia (DNU) que rige a nivel nacional desde hoy y hasta el 30 de abril, se permitirá el ingreso de comensales a bares y restaurantes hasta las 23, estirando el margen de tolerancia, pero acatando la prohibición en la circulación entre las 0 y las 6.
En los cines, teatros y centros culturales, junto a otros establecimientos, se admitirá una ocupación de hasta el 30 por ciento de la superficie de cada institución o local.
En diálogo con LT8, Ariana Montero, titular de la Cámara de Salones de Fiestas Infantiles, que vienen trabajando con la habilitación provisoria de gastronómicos, dijo que serán alcanzados por el cierre de las 23hs y el aforo del 30%.
“Nos perjudica mucho porque a los salones chicos, de mediana capacidad e infantiles, algunos con habilitación para 60 personas, un evento de 20 personas los complica”, lamentó.
“El impacto es altísimo y pone en jaque la rentabilidad; ayer se bajaron muchísimos eventos; pero por suerte hay mucha camaradería entre los colegas y vamos viendo como reprogramamos las fiestas”, explicó. Al mismo tiempo, rescató el subsidio de la provincia, que se había terminado en marzo pero se retomará desde ahora.
Como agravante, indicó que “la mayoría de los salones somos inquilinos, venimos de un año dificilísimo, y este año también lo será; en 2020 éramos 130; hoy somos 103; y ayer muchos dijeron que hasta acá llegaron, porque el 30% los liquida”.