Rigen nuevas restricciones en Rosario y San Lorenzo. El Gobierno central publicó un Decreto profundizando las restricciones por el riesgo epidemiológico el viernes pasado sobre las 23 horas. Tres días antes la cartera sanitaria nacional difundió que el 75% de las poblaciones de 40.000 habitantes o más estaban bajo la calificación de Alarma Sanitaria. Más allá del rechazo y críticas de algunos sectores políticos y los ciudadanos en general la realidad que Rosario y la región recibe pacientes de todo el territorio santafesino y las provincias limítrofes teniendo el nivel de camas críticas al borde, con un 90 a 95% de ocupación. Antes las nuevas restricciones, los diferentes sectores económicos piden permanecer abiertos para no sentir el impacto de las necesidades epidemiológicas.
“Estamos con mucha preocupación. Por la situación general de la pandemia., todos tenemos alguien cerca en la familia o amigos que la está pasando mal. Y en segundo término, en específico sobre la gastronomía es la urgencia de las medidas de asistencia que deja en evidencia estas restricciones. Porque sabemos que las consecuencias de las medidas es la imposibilidad de trabajar”, describió Alejandro Pastore, presidente del Paseo Pellegrini, y secretario de la Cámara Hotelera Gastronómica de Rosario.
La crisis económica no es exclusiva del país. A diario llega información de los problemas causados por el impacto de la pandemia que también pegó duro en muchos sectores productivos de la región Rosario. Respecto a los servicios gastronómicos, “en avenida Pellegrini tuvimos que soportar dos cierres definitivos. Es normal que en éste Paseo o en Pichincha no se produzcan la misma cantidad de cierres que en otros lados, porque son zonas atractivas”, explicó Pastore a LT8.
“La gastronomía está con una crisis tal que el costo, el valor de los fondos de comercio es muy mínimo respecto a otros momentos”, se refirió Pastore al sector respecto a la realidad económica, y aseveró: “Hay inversores que aprovechan el momento y se incorporan a la gastronomía para elegir su bar con mucha comodidad el lugar donde quieren trabajar porque una mayoría está en la posición de intentar vender por lo que nos pasó y nos pasa hoy como sector”, dijo.
El empresario rosarino explicó que “han habido muchos cierres y reaperturas con otras empresas u otros nombres. No es el signo de la gastronomía en general que si ha tenido una gran retracción a nivel mundial, por supuesto que también en Rosario, aunque con menor impacto en lo visual porque son emprendimientos más chicos, barriales o empresas familiares lo que implicó que se perdieron 4500 puestos de trabajo en la gastronomía desde el año pasado, es un 40% del empleo del sector gastronómico de los seis departamentos del sur de la provincia”, explicó Pastore.
Un golpe final. El referente de los bares y restaurantes de avenida Pellegrini contó en la radio que en los grupos de whats app parecen compra-venta de artículos y aparatos por los cierres que se producen, ofrecen todo por la mitad y así poder pagar cuentas.
“Creemos que tienen que relanzar el programa de ATP. Además, tiene que haber nuevas prórrogas a las leyes de emergencias y a los impuestos. Hay un tema que es el de los alquileres”, concluyó.