La Federación de Empresas de Salud advierte que sin ajustes en las cuotas no pueden garantizar aumentos de sueldos.
En diálogo con “El primero de la mañana” Marcelo Kaufman, Presidente de la Cámara de Entidades de Diagnóstico y Tratamiento (CEDIN), se expresó sobre la situación de los prestadores de salud y el pedido de aumento de ingresos para poder garantizar el aumento de salarios a sus empleados.
“El fenómeno inflacionario de Argentina, crónico y patológico, el sector de salud privada lo viene siguiendo siempre detrás de la ola, nosotros hasta el día de la fecha hemos actualizado prácticamente sin pérdida de valor de compra, los salarios de nuestros empleados, asociados y afiliados al gremio de sanidad. La última cláusula de revisión firmada en abril completó la inflación y el recupero por parte de los asalariados del 36.2% lo que hace que en los dos últimos años hayan tenido un aumento consolidado de prácticamente el 100% de los salarios; a la gente en un proceso inflacionario, esto no le alcanza, y en lo que va del año ya están prácticamente 25 puntos atrás de ese acuerdo logrado”
Mediante un comunicado, el reclamo se dirige al Ministro de trabajo de la Nación y a autoridades del gremio de la sanidad, esperando una pronta respuesta ante la problemática que atraviesa el sector.
Cuando hay un aumento de los costos y quiero recalcar el porqué de los costos, no tratando el salario como un costo real, si no que en medio de la pandemia y las cuarentenas, el gasto en otros elementos que no eran laborales como medicamento y tecnología médica, para atacar la pandemia, has cambiado la ecuación de los costos en el sector salud y todo esto se tiene que ir acomodando con aumento de aranceles. No cabe otra porque no hay otra metodología qué aranceles que acompañen los aumentos inflacionarios, esta es nuestra intención de hacerle saber al Ministro de trabajo, al Ministro de salud y al super intendente de salud, ya desde hace dos años, la brecha que tenemos entre los costos y los ingresos”.
Kaufman destacó el marcado desfasaje que tienen los prestadores debido a la creciente e incesante inflación que aqueja al país de forma permanente, pese a la ayuda por parte del Estado recibida el año pasado en medio de la pandemia.
“En 2020 prácticamente, por el acompañamiento del gobierno ya sea impositivo o vía ATP que fue a tapar la caída laboral que provocó las decisiones del gobierno, del distanciamiento y no poder atender las cuestiones médicas programadas y solamente atender COVID, ha hecho que la caída del trabajo haya sido fenomenal, el ATP vino a cubrir eso pero la inflación del 36% del año pasado no fue cubierta en general por aranceles. La medicina prepaga, por dar un ejemplo, que es lo que está sonando en tapa de los diarios, ha tenido una recomposición del 10% en el mes diciembre, que los prestadores recibimos por nuestra facturación recién en marzo o abril; el desfasaje que tenemos entre costos e ingresos es enorme”.
“Yo le digo que aquí en Argentina está equivocado de quién es el financiador, no es la obra social, no es la prepaga, quienes financiano somos los prestadores. Damos las prestaciones en el mes de junio, la facturamos el primero de julio y demoramos 90 días en cobrar esa factura, con inflación del 4% mensual, es el 12%. Nosotros pagamos los sueldos del primero de julio, pagamos los sueldos del primero de agosto, los del primero de septiembre y todavía no cobramos la factura por lo trabajado en junio; entonces cuando tenemos que definir quiénes son los financiadores, somos los prestadores médicos”.