La bajante del Río Paraná enciende alarmas en las grandes ciudades por los problemas que puede causar en las tomas de agua. Ahora, la preocupación llegó a los medios capitalinos, la exposición de los dramas del interior, a veces, provoca propuestas o soluciones. Las imágenes son impactantes, los drones han capturado la real sequía vista en los arroyos y ríos internos de las islas frente a Rosario. La falta de agua por la bajante, más el efecto de los incendios convocaron a las fuerzas políticas, gubernamentales y al tercer sector de la región Rosario a tomar medidas o al menos exponer algún compromiso con los ciudadanos y la naturaleza. Los diagnósticos están y quedarán para consulta, el daño es irreparable. La experiencia indica que es el momento de preguntarse por la intervención real sobre la prevención y proyección a futuro.
“La bajante en 1969 llegó a menos 82 centímetros, o sea, casi un metro menos que hoy. Sumale 66 kilómetros de ancho que tiene nuestro delta entre Rosario y Victoria. Y en el año 1944 estuvo en negativo 1.39 metros”, relató Carlos Vacarezza, periodista experto en actividades y deportes náuticos. Compartió una anécdota muy gráfica que recordarán los vecinos de la zona norte de Rosario sobre la bajante de 1969. “Cuando bajabas del colectivo 205 en la punta de calle Puccio, mirabas al Río y te daba la sensación que lo podías cruzar caminando”, relató.
En esos años existía en la zona norte, entre La Florida y el Yacht Club, un banco de arena que después de pasar una pequeña ondulación, una pequeña profundidad te encontrabas en el medio del río con el agua en las rodillas.
“Por el puerto de Rosario pasan 4200 a 4500 barcos por año. Es el mismo volumen de tránsito que el canal de Panamá”
Carlos Vacarezza
Además, contó Vacarezza que hace unos días navegó desde Rosario aguas arriba y que “en la boya 491, el río estaba un 80% ocupado por un banco de arena, todo el caudal pasaba por el 20%. Incluso, fotografiamos boyas en seco. El agua pasaba por ese embudo, y el viento la frenaba”.
Advertencia ante lo espectacular. “Es un río de llanura, todo ésto es normal. Por ejemplo, en 1916 la altura del río estuvo en negativo un metro. En 1917, negativo 93 centímetros respecto a los niveles del puerto de Rosario”.
“Hoy por el puerto de Rosario pasan 4200 a 4500 barcos por año. Es el mismo volumen de tránsito que el canal de Panamá”, precisó Vacarezza, en relación al volumen del tráfico respecto a las exportaciones principalmente agrícolas. “Los petroleros cargan en el Golfo de México y luego pasan para el Pacífico”, comentó. La pregunta que se impone ante semejante dato comparativo es si en Argentina están los controles y si esos barcos pagan los impuestos correspondientes, sabiendo que es una de las boca de ingresos de divisas a la economía Nacional.
Carlos Vacarezza citó una frase irónica de un referente del Foro Ecologista paranaense, el bioquímico Daniel Verzeñassi: “Hasta que no se derogue la ley de gravedad, el agua seguirá bajando”. Para explicar ‘lo natural’ y que “en Argentina tenemos muchos Deltas, hoy con un problema: al estar secos y expuestos al sol, con un sedimento rico, o sea una tierra llena de nutrientes, están creciendo árboles y vegetación en forma importante. Cuando empiece a regresar el agua, va a arrastrar todo, arbustos, más los camalotes, troncos y demás, lo que hará que se rellene y busque cualquier punto débil de una isla, o un curso para abrir nuevos rumbos y nuevos arroyos”.
Servicio de agua potable. “Creo que no será complejo en cuanto al suministro en Rosario. Si piden cuidado por una cuestión de lógica”, y destacó que la empresa Aguas “está trabajando bastante bien, no sé en Santa Fe Ciudad. Incluso, se pueden colocar bombas flotantes”.
Entre dichos y la historia. “¿Cuántas veces escuchamos que: la sequía o la bajante está pasando por el desmonte y por tal o cual represa?. Acabamos de citar años que no existían los desmontes ni las represas”, reflexionó Vacarezza en el programa Una Tarde Ferpecta.

Ayer y hoy: a 77 años de la otra gran bajante del río Paraná. ¿Qué tiene en común el estado actual del río con el descenso de 1944? Dos investigadores de la UNR analizan ambos fenómenos. Aquí el link para ampliar:
