En diálogo con LT8, el ministro de la producción de Santa Fe destacó que “para la provincia, sin dudas es una cuestión central”.
“Lo que queda por verse son estas dos categorías, de vacas de manufactura y conserva, que no se consumen en el país, animales que han terminado su ciclo productivo y ayudan mucho al sector de la cria, el tambo; y no tienen incidencia sobre los precios de la carne al consumidor argentino”, explicó el ministro, de amplio conocimiento en temas ganaderos.
“Estamos trabajando en las ideas, las propuestas y el trabajo articulado con el gobierno nacional a los fines de que esto se vaya resolviendo y se pueda tener una estrategia adecuada para abastecer el mercado interno y atender las exportaciones”, siguió Costamagna.
“Sin dudas, para esta provincia que tiene el 45% de las exportaciones y es el segundo rodeo nacional, con miles de productores y mas de 10 mil operarios en la industria frigorífica, es una cuestión central”, apuntó el funcionario. Para Costamagna, la apertura del mercado israelí “es un aliciente; y hoy estamos con esta situación que entendemos se va a resolver; este trabajo que se esta haciendo dará sus frutos”
“La forma más genuina de resolver esto es incrementar la producción”, evaluó. Asimismo, consideró que “pensar en exportar mas de 700 mil toneladas, implicaría un daño para todo el rodeo, porque estaríamos en un proceso de liquidación que no es lo deseable; uno busca lo contrario, un crecimiento y desde ese crecimiento podamos abastecer a los argentinos y tener una política exportadora mas clara”
Por último, dijo que esta medida del gobierno nacional no pone en peligro puestos laborales en Santa Fe.