La crisis política que atraviesa el Frente de Todos desde la derrota electoral del domingo pasado sumó un elemento álgido más. El analista política Carlos Fara encuentra falta de apoyo al Presidente.
Ayer, la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández, publicó una carta en la que, de acuerdo a las miradas de entendidos, profundiza el distanciamiento de ella con Alberto Fernández y extiende lo que muchos entienden como crisis política en el partido gobernante.
Carlos Fara, consultor y analista político, cree que “Cristna, tras las advertencias públicas que hizo a Alberto, no iba a querer asumir responsabilidad en el resultado de las elecciones. Con esta carta, no hace más que minar los puentes de entendimiento que se estaban tendiendo” entre ellos.
“Siempre existe la posibilidad de una negociación tras un ‘tiroteo’, aunque parece poco probable”, aclaró, para luego arriesgar que “otro escenario posible, mas no positivo, es que ella dé libertad de acción a los funcionarios que le responden para que decidan si se quedan o no y que ella manifieste una especie de apoyo crítico, sin comprometerse ni garantizar nada del gobierno. En este caso, Crisitna se olvidaría del 14 de noviembre y estaría pensando en 2023”.
Con respecto a la chance de sostener la gobernabilidad de Alberto sin sufrir sobresaltos, Fara observó: “Los gobernadores no dieron mucha señal de que van a apoyar al presidente, que no se manejó del todo bien dentro del Frente de Todos, porque mandatarios de provincias, gremialistas y Cristina le reclaman. En ese marco, los apoyos para sostener la gobernabilidad serán muy precarios”.
Ya poniendo la mira sobre las elecciones generales, el analista estimó: “Lo que los gobernadores harán será llevar a votar a más gente para mejorar el campo de la derrota sufrida en las PASO, y creo que Cristina se desentendió del 14 de novimbre, porque el clima está ahora más enrarecido aún que el domingo a la noche”.
“Cuando la política no está ordenada, las variables económicas – que dependen de las expectativas – se desordenan. Por lo tanto, no importa cuán grande sea el mercado del dólar blue: se disparan expectativas negativas en la calle, en el consumo, etc, y a partir de allí comienza un círculo vicioso”, concluyó.