El abogado defensor de la familia del entrenador personal asesinado en julio de 2019 considera que la perpetua está más que fundamentada por tres agravantes
Hoy culminarán las audiencias preliminares por el caso del asesinato de Marcos Guenchul, el entrenador que fue ultimado con dos balazos la noche del 24 de julio de 2019 cuando salía de su trabajo como entrenador personal en un gimnasio de barrio Azcuénaga.
Hay tres detenidos en este caso que, finalizada esta etapa preliminar, llegará a instancia de juicio: Prisicila Denoya, Maximiliano Panero y Caio Soso, quienes cumplen prisión preventiva.
El abogado defensor de la fmailia de Marcos, Leonel Botta, aclaró que “por la complejidad de la causa, la misma se dividió en dos etapas. La doctora (jueza de la causa, María Trinidad) Chiabrera ya decretó la apertura a juicio. Hoy se hace el ofrecimiento de pruebas: la fiscalía y la querella tienen no menos de 90 elementos de prueba y ahora conoceremos los elementos que tiene la defensa”.
“Para Panero, Soso y Denoya, la fiscalía y la querella han solicitado prisión perpetua, que es el máximo de la pena” previsto para un caso como éste, “fundamentado suficiente por existir tres agravantes: el vínculo (Marcos es el papá de dos hijas de Denoya y conocía a los demás acusados), una promesa remuneratoria (por cometer el crimen) hecha a Panero y el haber sido tramitado por el concurso de dos o más personas”.
El doctor Botta cree que, por la cantidad de causas existentes, el juicio oral y públicó se realizará el año que viene.