Desde el Colegio de Farmacéuticos ratificaron que en los últimos doce meses, los remedios aumentaron un 10 por ciento más que el índice de inflación y se mostraron proclives al control de precios que podría imponer el gobierno nacional.
Ayer, el Secretario de Comercio Interior de la Nación, Roberto Feletti, deslizó que el gobierno argentino maneja la idea de fijar precios máximos para remedios, porque mientras la inflación interanual ha llegado a aproximadamente un 52 por ciento, los medicamentos han aumentado un 62 por ciento en el mismo lapso.
Claudia Varela, presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Rosario, ratificó lo antedicho: “Mes a mes aumentan los medicamentos, llegando a un 40 por ciento en lo que va del año. Igual, hay un precio diferencial para los afiliados a Pami, que es un 40 por ciento menor que precio que fijan los laboratorios”.
“Hoy no sabemos cómo seguirán las negociaciones”, reconoció, en referencia a las reuniones que se mantienen periódicamente con Anses y Pami. “No tenemos claro si se pondrán precios máximos a los medicamentos o si se va a evitar el aumento mensual, que acompaña a la inflación. Los precios los fijan los laboratorios y eso es lo que nos llega para poner en mostrador al consumidor”.
“Por ley, el médico prescribe la monodroga y puede sugerir una marca. En las farmacias tenemos la opción de hacer el cambio si el paciente requiere un medicamento más económico, pero a veces no hay una alternativa significativamente más barata”, detalló.
Por último, la profesional mostró que no ve mal el establecimiento de un control de precios: “Esta iniciativa tuvo resultados en años anteriores. Por datos de las droguerías, sabemos que ha bajado la demanda de unidades. Pero no hemos visto productos que hayan aumentado más que otros”.