El hasta hace pocos días presidente de la Sociedad Argentina de Pediatría apoya, como el ente mencionado, enfáticamente la aplicación de la vacuna china, tras la controversia generada por la información errónea emanda por el gobierno nacional.
Se estableció cierta controversia por la objeción de algunos sectores de la sociedad a vacunar a menores de entre 3 y 11 años con la vacuna china Sinopharm, después de que el gobierno nacional dijera que en la propia China ya se había avanzado en el proceso, cuando en verdad no era así. La Sociedad Argentina de Pedíatría pidió, en un primer momento, más información para convalidarla, pero cuando la recibió, la convalidó.
El médico rosarino Omar Tabacco, presidente hasta hace pocos días de esa sociedad, no dejó dudas al ser consultado acerca de Sinopharm ‘sí o no’: “Sï, sin lugar a dudas. Siempre quisimos que se vacunara a los chicos, por protección propia y social y por la presencialidad escolar. No teníamos al principio la información que con la que contaba Anmat (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica) para avalar la vacuna, pero mostrada que fue en una reunión que mantuvimos, sí apoyamos, enfáticamente”.
“La decisión de apoyar fue de nuestros especialistas en vacunología, que son los más importantes del país, y nada tuvo que ver si se estaba aplicando la vacuna en China o no”, aclaró el pediatra. Y afirmó: “Siempre la mala información impacta. En salud pública, el factor principal para que la sociedad cumpla con las medidas que las autoridades establecen es la información. Sinopharm es una vacuna muy segura para ese rango etario, donde las formas graves (de contagio) son por suerte mucho menos frecuentes que en los adultos. En esotos casos de emergencia, lo que se busca es seguridad y efectividad, condiciones que reúne esta vacuna – elaborada a partir de virus muerto -, que también es, lejos, la que menos efectos colaterales generó, en todas las edades”.
“Me cuesta entender qué se quiere esperar”, admitió, sobre la opinión de colegas que aún sugieren aguardar para vacunar. “Quizás, que culmine el estudio de fase 3, pero tenemos que confiar en la idoneidad de Anmat, que fiscaliza ese estudio. Hay circulación de la variante Delta, afectando al 25 por ciento de los diagnósticos positivos en niños de Santa Fe, y ésa es otra de las razones por las que se decidió vacunar a los más chicos. De no haber sido vacunados, esta cifra podría ser más alta; quizás, como sucedió en EEUU, donde en la tercera ola de Delta, se vio que los chicos se enfermaban mucho más y, además, servían como reservorio del virus”.
“En el esquema oficial de vacunación, colocamos desde el nacimiento hasta el año de vida, colocamos seis vacunas con el mismo diseño que ésta, conformando una plataforma de seguridad absolutamente distintiva. Hace 50 años que colocamos esas vacunas en pediatría”, concluyó.