Palabras del psicoanalista Jorge Alemán, piscoanalista y Doctor Honoris Causa de la UNR, quien participará de un conversatorio que tendrá lugar mañana por la tarde en una librería del microcentro
Mañana a las 19, en la librería Homo Sapiens, ubcada en Sarmiento 819, de celebrará un conversatorio donde uno de los participantes será el reconocido psicoanalista Jorge Alemán, hablando sobre “El poder de lo siniestro sobre el deseo de emancipación”.
“El título es un concepto extraido de mi último libro de ideología; un análisis sobre el capitalismo y la capacidad ilimitada que tiene de reproducirse”, explicó. “La dimensión siniestra es algo presente en la filosofía alemana y en Freud. La potencia que tiene el capitalismo hace que vuelva siempre al mismo sitio y esto confronta con el deseo de emancipación, con la posibilidad de poder rehacerse, retornar y volver”.
Sobre el crecimiento de las ideas de ultraderecha, Alemán ha vertido ya algunas opiniones que repitió: “Hay un montón de ejemplos que pueden dar cuenta de cómo se ha votado por algo que atenta contra los propios intereses objetivos de los sectores votantes. Por ejemplo: en Francia, muchos inmigrantes votaron a a la ultraderecha, que es xenófoba. Hay sectores populares que votan a derechas que van a destruirlos. Esto, entonces, es más complejo que la idea de que los pueblos no se suicidan cuando votan porque son entes sagrados que tienen un saber sobre lo que les conviene. La historia desmiente eso y si observamos lo que está realizando la derecha actual, vemos que ya no maquilla ni miente sobre lo que va a hacer. Hay una responsabilidad en votar un proyecto que va a provocar un serio dolor a la polación”.
Las ideas de la ultraderecha crecen, entiende Alemán, “porque cuando se le destruye a una pesona todo su mundo y no puede construir su biografía y vive en medio de la supervivencia, crece su odio a lo político. Primero se manifiesta como un sentimiento de culpa por las impotencias que se sienten, y luego intenta resolver ello odiando a lo político, y la derecha mundial vive del rechazo a la política”.