El secretario de Seguridad provincial, Germán Montenegro, aseguró que fue “muy importante” la reunión con los presidentes de Rosario Central y Newell’s Old Boys realizada ayer tras la seguidilla de atentados contra los dos clubes. Por otra parte, ratificó que se mantiene la hipótesis que las balaceras contra las estaciones de servicio son para lograr una “intimidación pública” y son una respuesta a las políticas que está llevando adelante la Casa Gris contra el delito.
“Ayer tuvimos reuniones importantes para darle continuidad al trabajo que estamos haciendo. Con los estacioneros venimos trabajando desde que ocurrieron los atentados, establecimos un dispositivo particular de seguridad sobre las estaciones y los fiscales están llevando adelante investigaciones y estamos colaborando en todo lo que sea necesario para desentrañar esta situación”, destacó.
Con relación al tema del fútbol, Montenegro explicó que recibieron a las autoridades tanto de Newell’s como de Central y pusieron sobre la mesa “toda la problemática vinculada a la violencia”. “Lo importante es que se ajustaron mecanismos de seguridad con ellos y surgió la iniciativa de establecer una agenda de trabajo con el mundo del deporte”, añadió.
Sobre el tema los ataques a las estaciones de servicio, comentó que “la hipótesis más fuerte que se está trabajando es que los ataques a las son una intimidación pública”. “Hasta ahora no hay indicios que sea otra cosa. Esto tiene que ver con nuestra política de confrontar y tomar acciones directas”, concluyó.