Desde el inicio de la cuarentena muchos jóvenes volvieron a sus hogares de origen y decidieron ponerle fin al contrato.
Más allá del DNU (decreto de necesidad y urgencia) emitido por el gobierno nacional en el comienzo de la cuarentena obligatoria donde se congelaron por seis meses los contratos de los alquileres, muchos estudiantes universitarios que residen en Rosario han decidido cortar el vínculo contractual. Ante la incertidumbre de saber cuando volverán las clases presenciales y la crisis económica que golpe cada vez más algunos jóvenes volvieron a sus hogares de origen.
En diálogo con Guillermo Zysman en “El primero de la mañana”, Leonardo Beltramone, director del Observatorio Inmobiliario de Rosario, afirmaba que: “Muchos chicos abandonaron la ciudad en la primer cuarentena y se fueron a sus localidades de origen. La extensión de la cuarentena llevó a que padres de estudiantes revean el tema de los alquileres por una cuestión de costos”. Luego detallaba: “A mediados de abril, primeros días de mayo, las consultas aumentaron en la parte estudiantil para solicitar la rescisión anticipada de los contratos. Es muy difícil mantener una unidad alquilada en Rosario cuando los chicos estaban dando clases virtuales desde sus localidades”.
En relación a la actividad del sector, Beltramone expresaba que: “Hoy tiene una demanda interesante con el tema de alquileres igualmente va de la mano con la situación del país. No hay un incumplimiento muy alto con el tema de los pagos de los alquileres. La gran mayoría de las deudas que hay están consensuadas entre las partes. En algunos casos los inquilinos han realizado una refinanciación para no perder las unidades”.
Por ultimo se refirió a la tan esperada y sancionada Ley de Alquileres: “Se están haciendo los contratos con la nueva ley de alquileres a partir del primero de julio. No hubo ningún tipo de conflictos en la aplicación. Ahora ambas partes han perdido la previsibilidad en relación al costo futuro del alquiler”.