Uno de los que planteó dudas fue Sergio Gorosito, de Humedales Rosario. Explicó que los faros pueden detectar calor y humo, “pero lo que se necesita es que el gobierno envíe equipos bien preparados para combatir el fuego”.
En breve han de instalarse cinco faros para la detección de incendios en la zona de islas. Acerca del impacto real que podrán tener en medio de la cruel problemática de la debacle ambiental provocada, Sergio Gorosito, de la multisectorial Humedales Rosario, empezó aclarando que sólo se instaló uno, hasta este momento.
“Está en el Parque Pre Delta de Diamante (Entre Ríos). Los otros están previstos en Puerto Gaboto, en Victoria, en el peaje del Puente Victoria y en Villa Constitución, el cual debió instalarse hace dos años a un costo de 111 millones de pesos, pero sólo se emplazó el alambrado que se ubica alrededor”, cuestionó.
“Los faros detectan el calor y el humo, y el monitoreo visual llega nada más que a 30 metros del faro, pero no creo que sean de gran ayuda”, refrendó. “Se necesita que el gobierno envíe equipos bien preparados para combatir el fuego, porque Entre Ríos muy rara vez envió brigadistas, y cuando lo hizo, fueron sólo doce y que trabajaron por turnos”.
“Lo que se necesita es que se apruebe la Ley de Humedales. Tras las quemas se incrementó la agricultura con transgénicos y agrotóxicos. No sólo se perdió la flora y la fauna, sino que mucha gente se enfermó por el humo que invadió las localidades costeras”, insistió. “La ley no pasó a sesiones extraordinarias del Parlamento, aunque sí pasó la de Fomento a la Agroindustria. Nuestra mirada es que si la frontera agroindustrial sigue creciendo seguiremos teniendo desmontes y quemas; no sólo en las islas, sino en muchas otras zonas”.