Tras dos ataques consecutivos, dieron un mensaje en el que exhortan a la familia el pago de $2 millones. Evalúan mudarse a otro lugar.
“Dejen la casa o son boletas. O paguen $2.000.000”. Esa es la nota extorsiva que encontró una familia del barrio Ludueña luego de que le perforaran a balazos el frente de su casa en dos oportunidades durante el fin de semana. Una amenaza que ya es recurrente en los barrios de Rosario. “Fue una pesadilla, lo veía por los noticieros y pensé que nunca nos iba a pasar”, aseguró una de las víctimas.
Las balaceras de tipo extorsivas ocurrieron el pasado domingo en las inmediaciones de Perú al 200, donde vive una empleada doméstica con sus hijos desde el 2009. Según comentó, fueron al menos diez balazos que dañaron la fachada y el auto que estaba estacionado.
Sin embargo, cuando recobraron la calma y pudieron asomarse a la puerta, descubrieron que los atacantes habían dejado una nota debajo de una piedra con el siguiente mensaje: “Dejen la casa o son boletas o paguen 2.000.000”, aunque la nota no tenía número de contacto como suele suceder hechos similares.
“El domingo tuvimos que huir porque no sabíamos si volvían o no”, relató uno de sus hijos, al tiempo que su mamá agregó: “Fue una pesadilla. Lo veo en el noticiero y pensé que nunca me iba a pasar porque soy honesta. Sentí que me desmoronaba”, agregó su mamá, entre lágrimas de desesperación.
Lo más triste es que, al parecer, los delincuentes habrían logrado su cometido. Porque a raíz de estas amenazas violentas la familia evalúa dejar la casa que alquila hace más de diez años.
Este no es el primer caso con estas características. De hecho, el pasado 1º de noviembre una familia también fue víctima de una balacera de tipo extorsiva para que abandonen la casa. También ocurrió en el barrio Larrea, donde un carnicero decidió cerrar su negocio por las incesantes balaceras y amenazas constantes.
Fuente Diario La Capital
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