Elexdirector de la Federación Agraria no comparte la idea que la medida del gobierno argentino tienda a la desindustrialización. Propuso destinar el monto de aumento a las retenciones a conseguir que bajen el precio de las harinas y del pan
Más voces se suman para manifestarse acerca del anuncio del gobierno del cierre a las exportaciones de aceite y harina de soja. Pedro Peretti, de la Federación Agraria Argentina, se expresó en desacuerdo con las voces críticas que elevaron Omar Perotti, su ministro de Producción Daniel Costamagna y el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti.
“No estoy de acuerdo con que (el cierre) lleva a la desindustrialización, pero no me gusta pelearme con mi gobernador. Esta Federación reclama desde siempre que se equiparen las retenciones, pero lo que no toman en cuenta Perotti, Costamagna y Schiaretti es que hay empresas integradas verticalmente, lo que les da una posición dominante en el mercado que les permite pagar más por el arrendamiento de tierras que los productores agropecuarios genuinos, lo que conforma una competencia desleal”.
“Está todo tan tergiversado en el debate político económico de nuestro país, que ahora se quiere hacer aparecer a esta medida como que es contra el campo y la industrialización. Para nada debería impactar en el productor agropecuario”, aseguró. “La industrialización de la soja ya está realizada, por demás. El polo productor de Rosario es el más importante del mundo; por lo tanto, no necesita ventajas competitivas. El pedido que hacen los funcionarios es para proteger intereses monopólicos que afectan al conjunto de los argentinos”.
“Los dos puntos en que subirán las retenciones – lo anunciará el gobierno hoy – representan unos 400 millones de dólares que deben debe ir al fideicomiso de trigo, que maneja la Secretaría de Comercio Interior de la Nación, para subsidiar a la harina y que hayan harina y pan baratos. Ese volumen de dinero no debe ser pagado por los productores y tiene que servir para cumplir con un objetivo central de cualquier gobierno nacional y popular: que la gente pueda comer y acceder a alimentos baratos”.