Gabriel Pérez tenía 29 años. Sufrió en esa institución quemaduras graves que derivaron en su internación en el Heca, donde falleció el domingo último. Mientras la directora provincial de Salud Mental, Celina Pochettino, dio escasos detalles, la hermana de Gabriel dijo que alguien le prendió fuego.
“Mi hermano sufría esquizofrenia y se internó voluntariamente en la colonia, donde el 8 de marzo cumplió dos semanas en la sala de tránsito”, contó Tamara Pérez, hermana de Gabriel. “Nos informaron que sufrió una crisis, por lo cual fue atado de pies y manos para controlarlo, y que cuando la enfermera que lo cuidaba lo dejó solo por un momento, alguien le prendió fuego”.
“Al volver a donde estaba Gabriel, la enfermera quiso apagar el fuego con sus manos; luego, con una jarra de agua, y en última instancia, con un matafuegos”, describió con toda crudeza. “Nos dijeron que él discutió con alguien de ahí, no sabemos con quién, y que por esa pelea hizo esa crisis de esquizofrenia, algo que le pasaba cuando tenía alguna discusión. Si no, era un paciente tranquilo”.
“Fuimos a la justicia porque en el relato de la colonia hay cosas contradictorias. Nos informaron que estaba dopado” pero, a la vez, que “insultaba a todo el mundo. Queremos saber por qué la enfermera lo dejó sólo; cómo la persona que le prendió fuego tiene acceso a provocar un incendio. Hubo poco control, irresponsabilidad y abandono”.
Por último , Tamara contó que ni ella ni su madre pudieron visitar a Gabriel mientras estuvo internado; apenas, llevarle víveres y tabaco. “Sí mantuvo contacto telefónico diario con mi mamá. En la única oportunidad en que intentamos visitarlo, nos dijeron que nos escondiéramos para que él no nos viera, supuestamente porque había que contar con turno previo”.
Celina Pochettino, directora de Salud Mental de la provincia: “No puede asumirse que (la muerte) fue por las quemaduras”.
“Es complejo dar detalles porque están en marcha los pertinentes procesos de investigación, tanto por parte del Ministerio Público de la Acusación (MPA) como del Ministerio de Salud”, aclaró la funcionaria. “No se pueden arriesgar hipótesis”.
La funcionaria sí pudo detallar que “el episodio se produjo el miércoles de la semana pasada (9 de marzo) y que Gabriel fue derivado en el mismo momento al Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria, y luego, al Heca. “Al mismo tiempo, y como indica el protocolo para una circunstancia así, se dio aviso a la policía y por su intermedio, al MPA. Además, se libraron las actuaciones pre sumariales del ministerio”. En virtud de esto último, Celina también certificó que ya prestaron declaración las personas que estuvieron presentes en el momento.
“La persona tenía ingreso reciente por una crisis y por eso estaba en la sala de tránsito, pero tenía antecedentes de otras internaciones, por lo que era conocida en la colonia”, dijo también.
“Este tipo de hechos nos tiene que llevar a revisar el sistema de salud, que requiere cambios en lo organizacional, en el modelo de atención y en las prácticas de salud en general. Por eso estamos implicados en transformar a la Colonia de Oliveros, una institución vetusta, antigua, que tiene que ser modificada, como cada institución monovalente de la provincia, en virtud de la ley, que data de 11 años”, concluyó.