Ahora que la provincia facultó a la fuerza policial a detener e incautar motos circulantes cuando éstas no cuenten con la documentación pertinente, el presidente de la Asociación de Moteros rosarina se manifestó de acuerdo, como elemento que promueva la seguridad, aunque alertó que siempre hay excesos.
La provincia ha definido, a través de un decreto, que la policía podrá secuestrar motos que carezcan de documentación, tarea que hasta ahora estaba circunscripta sólo a los inspectores municipales de tránsito. El objetivo es apuntar a bajar el nivel de delito, ya que los organismos de seguridad estiman que el 70 por ciento de los delitos predatorios se cometen con la participación de esos vehículos.
Jorge Gallegos, presidente de la Asociación de Moteros de Rosario, pidió convenir en que “el delincuente lo es en todos los sentidos. Un vehículo ‘equis’ no hace a la cuestión, pero en este caso puntual, estamos de acuerdo con todo lo que promueva mejorar la seguridad. Si puede aportar a la prevención, bienvenido sea, porque somos parte de la sociedad”.
No obstante, Jorge se permitió pedir que la aplicación de este decreto “no sea un sistema de recaudación. Predicamos siempre que tenemos que andar con nuestro carnet de conducir, seguro al día, tarjeta verde o autorización para circular. Esto es por ley y es condición sine qua non. Pero todos sabemos que los abusos, lamentablemente, ocurren. Si buscan la quinta pata al gato, cuando hay personal destacado que no está calificado o cualificado para esta tarea (y esto está reflejado en el Observatorio de Seguridad Pública), empiezan a cometerse errores”.
Gallegos aclaró, además, que “los vehículos utilizados para los ilícitos tienen cilindrada de entre 90 y 150 cc. Es el mismo tipo de moto que usa el trabajador promedio y el que se está robando, precisamente, al trabajador. Se roban unas 5700 motos por día, y de esa cantidad, el 40 por ciento corresponde a Rosario y a provincia de Buenos Aires”.