A 40 años del conflicto bélico, hablamos con este veterano, neonatólogo y profesor de Pediatría que jugó en las inferiores de Central. Fue soldado camillero y llegó a las islas aquel 2 de Abril.
“Uno convive con Malvinas todo el año, pero para esta fecha los recuerdos y la adrenalina esta al palo, para nosotros (los veteranos) hubo un antes, durante y después de Malvinas”, arranca la charla con LT8
“Yo nací en el 63 y me habían incorporado al Servicio Militar el 2 de Febrero y el 2 de Abril pisábamos el suelo de Malvinas; yo llegué el 2 de Abril; estaba haciendo el Servicio Militar en la Patagonia, el 1º de Abril nos informaron que al otro dia íbamos a ir rumbo a Malvinas al dia siguiente”, siguió.
Para Petruzzi, “fue un impacto pensar que íbamos a estar en situación de guerra; en mis 18 años de vida nunca se me cruzó que iba a estar en una guerra”. “La sensación de muerte es inminente ante cualquier situación de riesgo. Yo estuve desde fines de abril en mi trinchera, en el aeropuerto y sufrimos los bombardeos permanentes, tanto aéreos como navales, siempre estuvimos bajo fuego enemigo”
“La primera vez que estuve ante un cráter de bombardeo aéreo fue el 4 de Mayo, cuando nos toco como camillero y patrulla de rescate desenterrar a dos soldados que quedaron sepultados cuando una bomba cayó al lado de la trinchera; por suerte pudimos rescatarlos con vida”, relató.
“Son momentos difíciles, con la incertidumbre de no saber si uno volverá; el dia se va entre pensar en el ataque inminente, estábamos siempre con la sensación de un desembarco en la zona donde estábamos, a la espera del enemigo”
Petruzzi volvió al continente el 19 de junio. “El 14 tuvimos que entregar las armas, quedamos como prisioneros de guerra, nos subieron a un barco inglés y después de 36 horas de viaje llegamos a Puerto Madryn”