Se cumplen 30 días de la polémica frase del presidente Alberto Fernández “Ahora empieza la guerra contra la inflación”. Mientras tanto, la inflación escaló y los precios no paran de subir. “Seguimos con algunos aumentos y con la cuotificación de productos básicos, como aceites y harinas”, aportó el supermercadista Sergio López
Hace un mes, Alberto Fernández dijo que la invasión de Rusia a Ucrania generaba una “lucha tremenda por los alimentos”. En esa línea, señaló que las consecuencias no llegaban “en forma de balas”, sino como “complicaciones económicas”. Y anunció: “Ahora empieza la guerra contra la inflación”.
“Seguimos con poca mejora. Aunque no hay tantos aumentos como en la segunda quincena de marzo, igualmente algunos productos subieron entre 3 y 5 por ciento. Y lo más complejo: sigue la cuotificación de entrega de aceites y harinas, que es lo que más nos preocupa”, dijo Sergio López, presidente de Casar (Cámara de Supermercados y Autoservicios de Rosario y la Región).
A causa de la inflación de marzo, “la caída del consumo en abril fue de casi un 50 por ciento y la gente pareció desaparecer de nuestros locales”, aseveró Sergio. “Igualmente, el cliente necesita comprar; entonces optó por dejar de consumir algunas cosas e ir hacia lo que es estrictamente necesario”.
“Hay una lista de precios que se acuerda entre la industria y el gobierno nacional y después, nos pasan esa lista para que acordemos participar o no, pero el resto de los productos están totalmente liberados”, reparó. “Si un aceite de girasol de litro de determinada marca está en esa lista de precios y esa marca no entrega la cantidad suficiente, el stock se termina muy rápido y pasa lo que ya sabemos: aparece el mismo producto con otra denominación y un precio totalmente elevado”.
Por último, el supermercadista comentó: “Ayer tuvimos una reunión para hacer un relevamiento de cómo viene la situación. Los elementos que tenemos son los acuerdos de precios pero no controlamos la inflación en sí”, cuestionó.