Quien fuera titular de Federación Agraria Argentina dijo que el cese de comercialización realizado ayer por los productores agropecuarios fue más una una muestra de oposición política que con los reclamos sectoriales
Ayer, el campo realizó un cese de comercialización contra la política agropecuaria del gobierno nacional. Unificación del tipo de cambio, normalización del suministro de gasoil y menor carga tributaria son algunos de los argumentos sobre los que se asentó la medida.
“Fue un montaje para generar un golpe de efecto”, dijo Eduardo Buzzi, quien presidió la Federación Agraria Argentina durante veinte años. “La protesta es lícita, pero es el fracaso de la negociación. Los reclamos fueron puestos en los medios de prensa; no, en reuniones con funcionarios”.
“Fue una puesta de escena que más tuvo que ver con la oposición política que con la reivindicación sectorial”, insistió, “y que Federación Agraria haya estado en esa montonera, como furgón de cola y sin plantear lo que necesitan los pequeños y medianos productores del país, me molesta”.
“No se plantean la segmentación de retenciones, un seguro multirriesgo para productores que trabajan en 300 ó 400 hectáreas alquiladas, módulos de cincuenta vacas por chacra, defensa de la agricultura familiar y de los pueblos (hay 600 pueblos de menos de dos mil habitantes en vías de extinción)”.
Tiene que haber un único tipo de cambio flotante y administrado por el Banco Central, en el marco de un acuerdo de precios y salarios entre empresarios y trabajadores, y entre oficialismo y oposición, para evitar un salto inflacionario más. El tipo de cambio está atrasado de acuerdo al nivel de retenciones que está soportando, pero el actual está causando mucha confusión”.