Los hinchas canallas coparon las inmediaciones del estadio a la espera el partido con Ñuls.
Los clásicos se viven como pocas cosas. Tiene un pulso distinto. Arrancan con la ansiedad por conocer el fixture y marcar a fuego la fecha en la que se disputará. A medida que se va acercando, la celebración máxima del fútbol rosario toma mayor volumen. Y las horas son el momento de mayor folclore. Las calles de las inmediaciones del estadio en el que se juega se transforman en mareas de colores que poco a poco terminan inundando las tribunas. Este jueves tocó en Central. Por eso la fiesta del clásico se está viviendo de manera especial en Arroyito.
Con entusiasmo y ansiedad, los hinchas comenzaron a copar las inmediaciones del Gigante de Arroyito horas antes del cotejo que está pactado para las 16.30. Los hinchas aparecieron principalmente por avenida Avellaneda, que se a poco se fue transformando en una calle peatonal, y para muchos el parque Alem fue el lugar de encuentro.
Familias, grupos de amigos, hinchas solitarios. Todos dijeron presente. Cada uno a su ritmo. Con su “pilcha” auriazul particular llegó para ver el partido al que el hincha siempre cataloga como el más importante del torneo.
La previa del Central- Newell’s es una fiesta. Los alrededores del Gigante, así lo muestra. Solo falta que empiece a rodar la pelota.
Fuente Diario La Capital
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