Arnaldo Dubin, integrante de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva, afirmó que la situación es dramática porque el personal sanitario entrega todo y está agotado. Dijo que la calidad de la atención que ofrecen los servicios de salud es cada vez menor.
Dubin afirmó que las reuniones al aire libre implican un riesgo en momentos en el que el sistema de salud está al borde del colapso. Y remarcó: “el personal sanitario ha dado todo y está agotado. Nos encontramos en una situación dramática, con una de las crisis sanitarias más grandes de la historia”.
En ese sentido, detalló que, con el número actual de casos, el sistema está amenazado y no puede expandirse más: “Una cosa son las camas y los respiradores, pero otra es el personal sanitario, los médicos, kinesiólogos y personal de terapia intensiva, y eso está muy mal”.
“Éramos pocos pero la pandemia desnudó la crisis estructural de nuestra especialidad. Estamos diezmados por la enfermedad, estamos agotados física y anímicamente, cometemos errores, nos contagiamos, compañeros han fallecido, por lo tanto, la calidad de la atención que brindamos es cada vez menor”, resaltó el médico integrante de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva.
En este marco, agregó que, mientras en el sistema de salud el personal se siente sobrepasado, por otro lado “hay gente que quiere salir, que sale, que no se protege, que no guarda las distancias y que hace fiestas. El punto clave es que nosotros desde el sistema de terapia intensiva ya hemos dado todo lo que podemos brindar; estamos agotados”, subrayó Dubin, referente de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva.
En ese marco, expresó que “es la conducta social lo que va a determinar lo que va a pasar en el país” y sostuvo que, si los casos siguen aumentando, estamos en riesgo de llegar a lo ocurrido en España o Italia, o, lo que es peor, lo que se vio en las calles de Bolivia o Ecuador.
“Ahora la tasa de letalidad está aumentando porque los casos han crecido descontroladamente, en las unidades de terapia intensiva todos los días se están enfrentando a la muerte e insistió con que muchos médicos ya no pueden “hacer más” de lo que hacen, que es mucho”, concluyó.
Fuente Diario Ámbito Financiero