En la tarde de hoy, en “La vereda de enfrente,” Raúl Bigote Acosta le preguntó (con la confianza que otorgan largos años de amistad y respeto) al Dr. en Bioquímica, Oscar Fay, acerca del tiempo que falta para terminar con esta pandemia, o por lo menos acercarse a alguna solución que nos dé un respiro, después de tantos meses de encierro.
El Dr. Fay, que ha pasado y superado cinco pandemias, manifestó que los datos y la experiencia “nos indican que no va a cambiar demasiado-la situación- de acá a fin de año, en el tema salud.” Remarcó que con el Covid-19 “no hay certezas. Desde que apareció, estamos detrás del virus, no delante del virus.”
Entonces, ante la pregunta de cómo se lo combate, el epidemiólogo dice que puede ser con una droga que lo mate. Un antiviral. O también, con una vacuna, que las seis o siete fábricas serias que la están estudiando puedan sacar. “Eso no va a ser antes de fin de año, con los necesarios datos que permitan su utilización,” acentúa.
Da detalles de los pasos que un laboratorio debe seguir para desarrollar con éxito una vacuna. En la última fase,que están transitando algunos laboratorios, son necesarios 100 mil voluntarios. “Hay que seguirlos con una precisión, dedicación y colección de datos inimaginables.”
Todo este proceso tiene la finalidad de establecer una “conducta global”, al decir de Fay. Implica tener en cuenta:Edad; cantidad de dosis; lugar donde vive; qué tipo de vehículo va a utilizar la vacuna; tendrá que conservarse; se diluirá en agua, etc.
Esto lleva tiempo. Un mínimo de seis meses. Siempre pensando “en tiempos supersónicos.”
Porque la ciencia ha avanzado mucho en estos años, pero con este virus no se cuentan con suficientes datos. El Dr. Oscar Fay destaca que algunas vacunas que se empezaron a usar el año pasado y éste, “han tenido 12 o 15 años de desarrollo.”
Al final, hay que alcanzar un nivel de inmunidad, son dos años de trabajo “para decir que está controlado,” en los que la vacunación está “condicionada por la cantidad que se produzca.” Una vez cumplida esta etapa, se la incorporaría al calendario de vacunas “que se dan con con las gripes.” Esto no sería antes del 2022.
El prestigioso bioquímico manifiesta ser un optimista y deja una afirmación que así lo pinta: “Siempre que llovió paró. Lo vamos a dominar al virus.”