Cristian Bottari es el subdirector del SIES. En el mediodía de este miércoles, estuvo en comunicación telefónica con el conductor de Trascendental (LT8), para acercar algún argumento que nos haga entender el aumento de los contagios en Rosario y contar sus vivencias en un año signado por el Covid-19.
El médico admite que frente al ascenso de los casos de contagio, ellos tratan de mantener lo más bajo posible el número de infectados y “frenar esta distribución viral.”
Esa lucha se lleva adelante a través de varias herramientas: Un codex sanitario; aumento de los testeos para localizar los casos nuevos; aceleración del proceso de las muestras extraídas; hacer el seguimiento de cada uno de los pacientes positivos y sus contactos estrechos, para así saber si lo mantienen con aislamiento domiciliario o lo internan, en caso de que se agrave el cuadro.
Para Bottari, hay una razón prioritaria que explica esta curva en ascenso de gente contagiada por el virus. “Hay una responsabilidad personal” muy grande cuando vas a visitar a tu familia, a tus amigos, sin tomar los recaudos necesarios al hacerlo. Tiene que ver con “lo que uno hace.”
En su caso personal, subraya el aislamiento en el que vivió en la primera etapa -sobre todo- , cuando el miedo y el desconocimiento marcaba la conducta de la población. Y aunque ahora se sumó a ese núcleo, su esposa e hijo, no deja de admitir que tiene un trabajo de riesgo y eso hace que no se reúna con nadie.
En otro momento de la charla, el subdirector alude a lo que lo ha sorprendido en este tiempo: Las marchas. “Ese cúmulo de gente en lugares públicos cuando hay un virus que está activo.” “No lo puedo creer,” remata.
Para Cristian Bottari es difícil pensar que en esta ciudad falte personal en salud, porque “Rosario es tan formadora de médicos, de profesionales, hay gente muy capacitada,” dice. “Quizás ese problema no nos toque en algún punto.”