Se trata de Hernán Lascano, especialista en la investigación de las causas de violencia en la ciudad
El Diario La Capital publica hoy una contundente nota redactada por el periodista Hernán Lascano, especialista en temas policiales del Decano. Hernán dialogó con “El Primero de la Mañana” por LT8 trasladando conceptos de esa producción.
“Es importante no vincular todos los crímenes para no caer en la tentación de simplificar las causas (de los crímenes), que son muy diversas. Lo común a todas es que producen un estremecimiento por una violencia muy grande, que no viene de ahora: las personas ejecutadas en Granadero Baigorria; el crimen del taxista; el atentado en el cementerio La Piedad; la muerte de Tiziana, que fue idéntica a la de Lourdes Cantero, ocurrida en 2013”, destacó Hernán.
“Antes, todo se concentraba en un área y en un solo conflicto. Ahora hay conflictos individuales y conflictos por economias encontradas, con el eco de una recesión muy marcada que también toca a la economía delictiva, porque sostener el trabajo de una banda implica recaudar de manera constante y eso acentúa las pujas, que tampoco son todas iguales” describió con claridad.
Otra cosa que el periodista de La Capital entiende como importante es “no naturalizar que la violencia epidémica se da en eriales de la ciudad y no creer que un índice de pobreza de 50 por ciento no influirá en el nivel de delito. Todo se fue degradando e impacta en este presente”.
Hernán Lascano, autor también de un pormenorizado y nutrido informe sobre la violencia de la última década en Rosario (“El mapa de la violencia en Rosario”), considera que la pregunta de por qué pasa esto en Rosario es de difícil respuesta. “En algunos lugares del país, la capacidad de la policía de intervenir y moderar los conflictos es mayor. Acá, la incapacidad de las fuerzas ha permitido el brote de grupos fragmentados en muchísimioas zonas de la ciudad. No habrá solución colocando más patrulleros, sino conociendo bien a estos grupos – con labor de inteligencia -, y es imprescindible alcanzar un acuerdo político para establecer conductas” en este aspecto.
Al cabo de la nota, el periodista se permitió acerca de la gestión del Ministerio de Seguridad provincial: “Sin meterme en la cuestión personal, veo notorias dificultades para manifestar una política clara en medidas preventivas. También creo que la seguridad concierne a mucho más que la seguridad; sobre todo, cuando la violencia proviene de un escenario degradado. Había una situación de políticas sociales que habían logrado atemperar la violencia en lugares puntuales como Grandoli y Ludueña, por ejemplo; políticas que se abandonaron. Ahora, tenemos que saber aún si esas políticas públicas de desarrollo social se aplican, igualmente no tendrán efectos a corto plazo”.